Nos empeñamos
en seguir encadenados
a recuerdos,
a deseos,
sueños y quimeras,
atándonos
a realidades inexistentes,
queriendo creer
las mentiras de los demás
y las propias mentiras,
sin soltar eslabones
que pesan sobre nuestra alma
como losas de cementerio...
-marian tarazona-